El archipiélago portugués es una de esas joyas que consiguen preservar de momento su esencia, y se ha convertido en un destino que atrae a viajeros de todo el mundo si bien ha podido mantener su apuesta por el turismo sostenible. La compañía portuguesa Tap Air, la principal opción para viajar desde España a estas islas ha elaborado una lista con diferentes motivos para recordar el viajero porque se trata de un destino que hay que conocer:
Sumergirte en la naturaleza más verde y exuberante. Las nueve islas que componen este pequeño paraíso desbordan naturaleza y autenticidad. Santa María, São Miguel, Terceira, Graciosa, São Jorge, Pico, Faial, Flores y Corvosonnueve joyas de la naturaleza y muy diferentes entre sí. De origen volcánico, el archipiélago sorprende al viajero desde el primer momento gracias a una naturaleza imponente que se resiste a ser dominada por el paso del hombre.
Relajarte en termas y piscinas naturales. En Azores es posible pasar de relajarse en un baño termal a 38 grados a refrescarse en el Atlántico en curiosas piscinas naturales a orillas del océano. Las famosas caldeiras naturales de aguas termales se han hecho populares en todo el mundo. Algunas de las más destacadas son: “Caldeira Velha”, “Terra Nostra Garden Hotel”, y “Poza de Dona Beija”.
Huir de la masificación turística. En los últimos años las nueve islas han visto crecer el turismo, aunque de forma controlada. El archipiélago ha apostado decididamente por el turismo sostenible y hoy en día sigue conservando toda su esencia. Si buscas un destino donde desconectar y reencontrarte contigo mismo, Azores es sin duda un refugio ideal. En su conjunto, el archipiélago no llega a tener un total de 250.000 habitantes, por detrás por ejemplo de comunidades de España como La Rioja.
Saborear la gastronomía portuguesa. Deleitarnos con la gastronomía lusa es apostar sobre seguro. Si además nos dejamos seducir por productos frescos recién pescados en las aguas del Atlántico la experiencia mejora sustancialmente. Pulpo, bacalao, lapas, percebes, podremos encontrar por doquier cualquiera de estos manjares en los restaurantes del archipiélago. Uno de los platos locales más curiosos es sin duda el cocido das Furnas, elaborado con el calor que emana esta tierra volcánica, tras pasar más de siete horas de cocción.
Descubrir lagos de ensueño. El pasado volcánico de las islas ha dejado impresionantes lagos ocupando antiguos cráteres. En Azores existe casi un lago para cada tonalidad de los colores azul y verde. Impresionantes estampas que dejan boquiabierto a cualquier visitante. “Lagoa de Sete Cidades”, “Lagoa do Fogo”,o “Lagoa do Negro” son algunos de los más imponentes.
Avistar 25 especies diferentes de ballenas. Azores es uno de los mejores lugares del planeta para el avistamiento de cetáceos. A principios de la década de los ochenta se generalizó la prohibición de la caza de ballenas y hoy en día se calcula que cerca de 25 especies, entre residentes y migratorias, pueden ser observadas en sus aguas. En los meses de primavera entre las islas de São Miguel y Santa Maria, es habitual el avistamiento de ballenas azules, el mayor animal del mundo, con cerca de 30 metros y hasta 150 toneladas de peso
Practicar deportes en un marco incomparable. Otro de los grandes atractivos de las 9 islas es la posibilidad de practicar numerosos deportes rodeados de los mejores paisajes. Senderismo, barranquismo, piragüismo, buceo, surf, paddle surf son sólo algunas de las actividades que los visitantes pueden hacer para disfrutar de las maravillas naturales del archipiélago. Competiciones deportivas internacionales como el “Red Bull Cliff Diving” se han fijado en las islas para celebrar sus campeonatos cada año.
Hacer parada en alguno de los numerosos miradores que tienen las islas. Las carreteras de Azores parecen haber sido trazadas para llegar a los numerosos “miradouros” que tienen las islas. Sin duda, uno de los mejores planes para realizar es hacer parada en algunos de ellos y simplemente tomarse un descanso con vistas al horizonte. “Miradouro da Pontado Sossego”, “Miradouro da Serra do Cume”, “Miradouro da Ponta da Madrugada”…son sólo algunos de los más famosos.
Tomar té en una de las pocas plantaciones de Europa. Cuando pensamos en plantaciones de té, nuestra mente nos suele llevar a países lejanos de Asia como China, Japón o Sri Lanka. Sin embargo, pocos conocen que en Azores se cultiva desde hace más de 100 años, en concreto en la isla de São Miguel. La de “Porto Formoso” y la de “Gorreana” son las dos plantaciones que pueden ser visitadas en el archipiélago. De hecho, la pasión por los productos autóctonos es un punto en común en las islas, como también ocurre con la piña, otra de las señas de identidad de Azores.
Para volar de forma accesible desde España únicamente solo hay que hacer una pequeña escala en la vecina Lisboa. Gracias a TAP Air Portugal hay prácticamente 4 vuelos diarios a la capital de São Miguel (Ponta Delgada) y uno diario a Terceira. Además, gracias al programa de Stopover de la compañía es posible pasar unos días en Lisboa por el mismo precio del vuelo
