Existen multitud de modos de adentrarse en el corazón de Andalucía. Entre ellos, Caminos de Pasión ofrece un recorrido por el patrimonio histórico-artístico, la gastronomía, las tradiciones, la artesanía y la naturaleza del centro geográfico de la comunidad.
Los diez municipios que integran esta propuesta son emblemáticos por su riqueza histórica y patrimonial: Alcalá la Real en Jaén; Baena, Cabra, Lucena, Priego de Córdoba y Puente Genil en Córdoba; Carmona, Osuna, Écija y Utrera en Sevilla, una Ruta que además forma parte de la Red Europea de celebraciones de Semana Santa y Pascua.
Caminos de Pasión, integrado en Rutas Culturales de España, comprende un recorrido por el centro de Andalucía desde Utrera en Sevilla hasta Alcalá la Real en la provincia de Jaén, o viceversa, el cual se puede realizar de diversas maneras: en coche, moto, autocaravana, bicicleta, a caballo o a pie, las últimas tres opciones con posibilidad de hacerlo a través de los caminos naturales o vías verdes que recorren la Ruta y a las que se suma un Gran Sendero que supera los 300 kilómetros.
Aunque la Semana Santa es una cita marcada puntualmente en el calendario, es relevante destacar que los municipios que componen la Ruta Caminos de Pasión se pueden visitar los 365 días del año, dado que el patrimonio histórico-artístico y cultural presente en los mismos está a disposición de los visitantes en cualquier época.
La Ruta cuenta con una red de museos y espacios expositivos en torno a la interpretación de la Semana Santa, donde se puede conocer la particularidad de esta fiesta, sumado a una ruta señalizada en cada municipio con esta temática. Asimismo, las imágenes y ajuares están expuestos permanentemente en los templos y/o casas de hermandad, sede de cada una de las mismas.
Ligado a este mundo cofrade, se puede disfrutar de una tradición artesanal única. Oficios que se han ido manteniendo de generación en generación y que han sabido conservar ese savoir faire, mediante técnicas y tradición propia, desde sencillos utensilios para las labores domésticas o del campo, hasta auténticas joyas artísticas. Piezas de alfarería y guarnicionería, bordados o tallas que son fruto de una herencia centenaria se pueden contemplar en los talleres que albergan este saber.
Sin duda, una vivencia que conquistará a los más inquietos y curiosos. Por último, su gastronomía y el entorno natural en el que se ubica esta Ruta hace que cualquier momento sea idóneo para disfrutar de sus manjares y de los caminos que la recorren.
Refiriéndonos concretamente a la Semana Santa, y a las fiestas religiosas que se celebran durante la misma, es una cita que se vive con verdadera intensidad en toda Andalucía, especialmente en los municipios que integran la Ruta. Esta tradición, que se ha mantenido a lo largo del tiempo en estos rincones, constituye en la actualidad la unificación de un patrimonio histórico, cultural, social e inmaterial de un valor incalculable.
La Semana Santa en los municipios de la Ruta
Alcalá la Real
Este municipio de la Sierra Sur de Jaén puede presumir de conservar una de las Semana Santa más cosmopolitas y alegres. Pasos mímicos con representaciones teatralizadas, pregoneros que vocean cantos desgarrados con peculiares melodías y letras entre la poesía y la prosa transmitidas de generación en generación, toques de trompetas roncas, figuras con máscaras o ‘rostrillos’ coloridos y llamativos ropajes, conforman un singular repertorio folclórico de interesante valor antropológico, en el que la religiosidad y la algarabía popular se dan la mano. En Alcalá la Real conviven cofradías más históricas (de 1597 data la Real Cofradía del Dulce Nombre de Jesús y Santa Caridad) con algunas que han aparecido en las últimas décadas, además de ser cuna de imagineros tan reconocidos como Martínez Montañés o Pablo de Rojas.
Baena
La Semana Santa de Baena, enclavada en plena campiña cordobesa, se configura en torno a la figura del judío, desfilando dos turbas, denominadas coliblancos y colinegros, en un total de 16 cuadrillas, con especial relevancia también de las hermandades y la representación de los pasos vivientes. El sonido que distingue a su Semana Santa es el del tambor, reconocido por la UNESCO como Patrimonio inmaterial de la Humanidad. Más de 5.000 tambores se pueden dar cita en una sola jornada.
El mundo cofrade lo componen 7 Cofradías, unas 50 Hermandades y sobre 75 Cuadrillas, además de 8.000 cofrades, en un municipio que no supera los 20.000 habitantes. Como momentos clave de la Semana Santa de Baena destacan el Auto-Sacramental del Viernes Santo, el Paso de los Evangelistas o el Lavatorio de los Apóstoles.
Cabra
Enclavada en un amplio valle y alzada sobre dos colinas, Cabra cuenta con un total de 25 hermandades y 4 archicofradías, datando la más antigua, la Vera Cruz, de 1522. Alrededor de 6.000 personas están, de una u otra manera, implicadas en todo el entramado cofrade de Cabra en una Semana Santa con influencias claramente sevillanas en pasos, forma de llevar los mismos y estilos musicales.
Fruto de ese trabajo cofrade es la gran solemnidad de los desfiles procesionales, con sus mantillas, nazarenos, penitentes, acólitos, y de la Carrera Oficial, seña característica también de la Semana Santa del municipio. Uno de los elementos más relevantes es el rico patrimonio de todas las épocas que las hermandades de Cabra han sabido crear, conservar y legar, aunando tallas de los mejores imagineros barrocos, con gran importancia de la Escuela Granadina.
Carmona
Ubicada a 30 kilómetros de Sevilla, Carmona ostenta el título de Ciudad desde que Felipe IV se lo otorgase en 1630. Su Semana Santa es un vía crucis de pasiones repartidas entre la propia monumentalidad de la ciudad. Cabe destacar, por el indudable interés artístico de su imaginería, que el municipio alberga la pieza más antigua datada que procesiona en la Semana Santa andaluza: El Señor de la Amargura, realizado en 1521 por Jorge Fernández Alemán.
Además, conserva tallas de José de Arce, José Montes de Oca, Pedro Roldán, Benito Hita del Castillo o Manuel García de Santiago. De gran importancia es también el ajuar que rodea y acompaña a los pasos. Así, los bordados, tallas en madera y, sobre todo, la orfebrería forman parte de este bello conjunto.
Écija
Asentada en el valle del Genil, está considerada como uno de los centros artísticos más importantes de Andalucía. La Semana Santa de este municipio, conocido como la ciudad de las torres, destaca por su barroquismo y la belleza de sus pasos e imágenes cuyas tallas, realizadas por imagineros como Juan de Mesa, Montes de Oca o Gaspar de Águila, entre otros, cuentan con siglos de historia.
Los palacios, las casas señoriales y la belleza de su casco histórico sirven de marco perfecto para el fervor con el que los vecinos viven la fiesta. Una de sus mayores riquezas es su artesanía, con multitud de manifestaciones que van desde la cerámica popular hasta los finos bordados en oro, además de sus imagineros y escultores. También cuenta con un rico patrimonio de orfebrería.
Lucena
Situada en el centro de Andalucía, ha sido cuna de tres culturas, la judía, la árabe y la cristiana, que dejaron su huella en su patrimonio monumental y cultural. Ha sabido conservar hasta nuestros días su elemento diferenciador de la Semana Santa, la santería, asociada al modo de portar los pasos sobre los hombros, un estilo propio e inconfundible de vivir la Pasión que cuenta con vocabulario propio y configura parte de las relaciones de sus habitantes.
Arte, estética y tradición se combinan en los más de treinta pasos y 17 cofradías que procesionan, con una magnífica riqueza imaginera, a hombros de los santeros y al ritmo de un característico toque de tambor y del torralbo. Cuenta con un patrimonio realizado por nombres tan cruciales como Pedro Roldán o José de Mora. Lucena cuenta también on saetas locales propias, de santería o borrachuna, diferenciadas en las saetas de Alcantarilla y de Perrilleja.
Osuna
Joya patrimonial de la campiña sevillana a medio camino entre su capital, Granada y Córdoba, ha marcado la génesis y el desarrollo de su Semana Santa. De modo que la tradición, como se entiende en la actualidad, es resultado de un cúmulo de circunstancias que se apegan, según la ocasión, más al occidente o al oriente andaluz. Muchas de las corporaciones de la villa ducal mantienen un estilo propio a la hora de portar los misterios y palios. Se trata del estilo ursaonense. Cabe destacar también el valor incalculable de las tallas que componen su imaginería, de autores como Juan de Mesa, Vicente de Tena o José de Mora.
Igualmente, se mantienen dos pasos alegóricos que aluden a la Resurrección y a la muerte, respectivamente. Se trata del Niño Jesús Perdido y la alegoría del Triunfo de la Santa Cruz, conocida como la Canina. Hablar de Osuna es también hablar de tierra de Saeta ya que vio nacer a uno de los máximos exponentes actuales de este estilo, Manuel Cuevas. Además, desde hace más de veinte años se convoca durante la Cuaresma el prestigioso concurso de saetas “Carmen Torres”.
Priego de Córdoba
Situada en el Parque Natural y Geoparque de las Sierras Subbéticas, conserva toda la esencia andaluza que podremos descubrir en el bello Barrio de la Villa, de origen musulmán. La solemnidad de las distintas hermandades que se suceden desde el Domingo de Ramos, contrasta de forma rotunda con la explosión popular del Viernes Santo, donde una ingente cantidad de personas anhelan situarse debajo de las andas para subir hasta el monte del Calvario al Nazareno, que bendecirá los miles de humildes y simbólicos “hornazos” llevados por sus devotos.
También cuenta con gran fervor la imagen de Jesús en la Columna, una bellísima talla de Alonso de Mena. El Prendimiento, una representación de teatro sacro que representa la última cena de Jesús y la Oración en el Huerto son algunos de los momentos más significativos, en un municipio en el que las tallas renacentistas y barrocas conviven con las clásicas y neos. Desde 1602, se continúa la tradición de los sonidos del Pestíñez y el Bacalao al amanecer del Viernes Santo. Asimismo, cuenta con excelentes artesanos, sobre todo de imaginería religiosa, y vinculados con ellos, doradores y restauradores.
Puente Genil
Con 24 hermandades y más de 60 corporaciones bíblicas, la Semana Santa de este municipio de la campiña cordobesa, localmente conocida como La Mananta, representa una de las manifestaciones de religiosidad popular más importantes de Andalucía, rompiendo con el prototipo habitual de esta celebración e incorporando incluso un argot propio. El elemento más original y representativo lo componen las más de 400 figuras bíblicas que desfilan junto a las procesiones, representando personajes del Antiguo y Nuevo Testamento, así como símbolos y alegorías de la religión. Las figuras bíblicas se articulan en corporaciones, que son asociaciones cívico-religiosas con sede en los cuarteles de Semana Santa, cuya actividad se desarrolla a lo largo de todo el año.
Junto a las figuras bíblicas, procesionan a hombros de los pontaneses imágenes muy veneradas como Nuestro Padre Jesús Nazareno: El Patrón. Igualmente, es de gran importancia es la saeta cuartelera, así como los cantos corales pontanos, la alondra y el batido, que pueden escucharse durante la Cuaresma. Su artesanía está mayormente relacionada con la Semana Santa, contando con el único artesano dedicado a la elaboración y restauración de plumeros y tocados de plumas.
Utrera
Enclavada entre la campiñasevillana y las marismas del Guadalquivir, Utrera está declarada conjunto histórico-artístico. Entre las peculiaridades de la Semana Santa cabe destacar su trabajadera autóctona y la conservación de un léxico propio. La riqueza patrimonial de su impresionante casco histórico aporta una verdadera majestuosidad a los desfiles procesionales.
La estrecha vinculación histórica de Utrera con la cercana capital hispalense ha determinado el profundo sello sevillano de su patrimonio artístico. En cuanto a la música, sin duda podríamos destacar la importancia de las marchas procesionales a cargo de agrupaciones y bandas. También es importante recalcar también los cantes de madrugá de los gitanos, en un municipio con gran arraigo flamenco.
Novedades Semana Santa 2021
Debido a la actual situación de crisis sanitaria, y a diferencia de años anteriores, el modo de celebrar la Semana Santa como tradicionalmente se conoce se ha visto importantemente modificado, algo que ha significado también que la Ruta Caminos de Pasión replantease sus actividades con objeto de continuar la promoción de esta tradición para acercar a la población las costumbres propias de esta época del año. Entre las actividades ofrecidas destaca la Ruta de Cocina y Repostería de Cuaresma y Semana Santa, que este año llega a su sexta edición y cuenta con 62 restaurantes y bares, y 32 pastelerías.
Para más información: www.caminosdepasion.com
Fotos: Turismo de Andalucia
Paisajes toscanos al sur de Córdoba