Contábamos en una de las primera editoriales de la revista porqué habíamos decidido bautizarla con el nombre de Magellan. Fue en honor, os dijimos, a Fernando de Magallanes –Magellan, en inglés–, aquel navegante portugués que tras descubrir el canal natural que permitía cruzar del océano Atlántico al Pacífico pasaría a la historia por ser el primer occidental en dar oficialmente la vuelta al Mundo. Como os revelamos, fue en realidad su expedición la que, muerto él, logró dar ese célebre primer tour a la Tierra en 1522, pero pocos lo saben. Fue el relato de aquella hazaña el que logró encandilar a la gente y Magellan, vivo o muerto, se convirtió en leyenda.
Hoy embarcarse en un viaje es infinitamente más fácil que en tiempos de Magellan, cierto. Pero hay algo que no ha cambiado: ese efecto hipnótico que se crea al contarlos. Hoy, de hecho, sólo varía la forma en que lo hacemos. Ya no hay que esperar años, meses, retornos de expediciones y largos libros para escuchar historias que llegan de nuevos mundos. Hoy los viajes se cuentan minuto a minuto, en las redes, por teléfono, subiendo vídeos, enviando fotos… o escribiendo un blog como este.
En Magellan sabemos que hay muchos tipos de viajeros, y muchos tipos de viajes. Quizá por eso hay muchos tipos de blogs de viajes. El que hoy estrenamos aquí quiere tener, como la revista, un poquito de cada uno. Melancólicos, aventureros, glotones, sibaritas, salvajes, organizados, prácticos, previsores, trendys, románticos, lectores, miedosos, montañeros, culturetas,… Hemos reclutado a cuatro viajeras que parecen cubrir muchos de estos frentes. Dejamos que se presenten… y esperamos que como Magellan, os hipnoticen con sus historias …
1 comentarios
Felicidades por vuestro blog! Espero los nuevos posts cuanto antes!