Vietnam es un lugar fantástico para empezar a viajar, gente encantadora y paisajes espectaculares. Se trata de un lugar bastante fácil por el que viajar, no es un sitio con riesgo y a la vez tiene mucha aventura.
Os voy a contar uno de los lugares que más me apasionaron de este país, porque el resto lo podéis encontrar en muchas guías.
La Isla Con Dao, fue una súper experiencia, cogimos un vuelo desde Can Tho, un mini avión que parecía más avioneta que un vuelo de pasajeros y aterrizamos casi en el borde del mar. Pero os aseguro, a los temerosos de los aviones, que merece la pena 100%. La isla se utilizaba como cárcel en la guerra de Vietnam y todavía se ve los restos del pasado. Los lugareños no la concibe como un lugar de veraneo o un lugar de relax, con lo que no es una isla muy poblada y solo viven aquellos que trabajan en la pesca o que llevan allí desde generaciones anteriores. Es un lugar mágico, exótico y virgen. Puedes ir a campings con bungalows delante de la arena de la playa o puedes ir a hotelazos de extra lugo (exactamente al hotel que van Angelina Jolie y Brad Pitt cuando van a Vietnam para mostrarle las raíces del país de uno de sus hijos adoptados).
Estuvimos unos pocos dias, pero hicimos de todo, nuestro plan empezó desayunando delante del mar, posteriormente, decidimos alquilar una moto, la isla no es muy grande, pero así podríamos verla toda y la verdad fue una muy buena decisión. Recorrimos toda la isla de arriba a bajo, viendo playas espectaculares y vacías, sí sí, ¡vacías! sin palabras.
También nos adentramos en la selva, eso sí que fue gracioso, después de andar horas y horas por un camino, el sol empezó a caer y de golpe empezamos a oír peleas de monos, murciélagos volando a 2cm de nosotros… Nos miramos entre todos nosotros y decidimos volver a todo trapo sin pensárnoslo un segundo. Ahora, siempre que nos acordamos y nos reímos un montón.
Al día siguiente, decidimos hacer Submarinismo, hay 3 escuelas en la isla donde poder hacerlo. Con dao tiene uno de los mejores arrecifes de coral de la zona y lo constatamos, ¿cómo puede haber tantos colores y tan bonitos debajo del mar? La naturaleza es maravillosa.
También había un templo budísta precioso. Tenías que subir tropecientas mil escaleras para llegar a él, pero el esfuerzo tiene su recompensa. Era un lugar especial. Posee campos llenos de flores de loto y pastos verdes por todos lados.
Ver las puestas de sol y las salidas del sol son mi especialidad y en esta isla ninguna tiene desperdicio.
¡Os recomiendo ir 100%!