Y llegó, por fin, el verano. Han subido las temperaturas, el día alarga, se hacen los primeros planes de playa y empezamos a olvidarnos de mirar el reloj, “porque cuando el sol se queda a la primera ronda de la noche, a nadie le importa qué hora es” y claro, también se planean esas escapadas para huir del calor, las hordas de turistas que nos invadirán hasta bien entrados en septiembre y la maldita rutina, para ello les propongo 5 lugares a los que huir un fin de semana.
Calella de Palafrugell
Hace un par de años, gracias a un buen amigo, fuimos a Calella a pasar el día, el plan era bien simple, llegar pronto, plantar la toalla, comernos un arroz y volver a casa. Siempre nos había hablado muy bien de aquel pueblo de la Costa Brava, pero tienen que verlo para entenderlo, Calella es paz, tranquilidad y mucha calma y sus playas son para no moverse de ahí en todo el día. Es, como diría mi querida Olivia, Spensieratezza, en definitiva, un lugar del que nunca querrán marcharse.
Andorra
Si no son ustedes muy de playa pero igual quieren relajarse, una escapada a Andorra con visita al maravilloso spa Caldea es su plan perfecto. En Caldea podrán huir de todo, en sus piscinas y jacuzzis se olvidaran durante un buen rato, de todo. Mención especial para la piscina exterior donde podrán relajarse con un baño de burbujas mientras aprecian las vistas de las montañas que la rodean. Y si no, pues siempre podrán perderse entre los escaparates de todas las tiendas que se encontraran en las principales calles del pueblo, visitar el pequeño Museo Thyssen de Andorra y degustando la gastronomía y vinos locales, mención especial para la tienda/restaurante Marquet y su inmensa, literalmente hablando, bodega.
Donosti
Una de las mejores playas de todo el país, si no la mejor, no podía faltar en esta lista. Y es que qué les voy a contar de Donosti, la capital Guipuzcoana lo tiene todo para hacer el mejor plan de todos, el plan BCC™, Beber, Comer y Caminar. Beber los mejores vinos del País Vasco, Comer o inflarse a pintxos en lo viejo, son de visita obligada Casa Gandarias y a Fuego Negro, o visitar las casas de alguno de los maestros de la gastronomía vasca como Arzak o Subijana y Caminar por el paseo de la Concha o la Zurriola, subir al Igueldo o al Urgull.
Valencia
De Valencia ya les hablé el pasado mes de marzo, y si por aquel entonces ya estaba bonita ahora que ya hace tiempo de visitar la playa y que el día alarga más de la cuenta, debe estarlo aún más. Otra ciudad en la que se pueden perder caminando por El Barrio del Carmen y acabar haciendo el vermú en el mercado de Colón. Otra opción, si no, es bajar a la playa, dar un paseo y bañarse en la Malvarosa y luego ir a comer uno de los mejores arroces de la cuidad en Casa Carmela. El tema de cenar, ya es otra historia, la cena será en Sucede de Miguel Ángel Mayor Moyano, o no será.
Tarragona
Para terminar, uno de mis últimos descubrimientos, Tarragona es para pasearla con calma, sin prisa, como se debería hacer en este tipo de escapadas y descubrir cada uno de los rincones de su casco antiguo para terminar tomando el vermú en alguno de los bares que se encontrarán paseando la ciudad. Y si es un buen vermú y el lugar lo permite, terminarán comiendo en ese mismo lugar. Después de eso, un paseo hasta las escaleras de la catedral (les reto a subirlas después de comer), un helado en la plaza del ayuntamiento y para terminar, un poco de playa no les hará ningún daño.
Estas son mis 5 recomendaciones si el calor, los turistas o la rutina pueden con ustedes y necesitan escapar y no pensar en nada más que cuál será la próxima botella de vino que descorcharán. Y por favor, feel free de añadir sus recomendaciones ahí abajo en la sección de comentarios. Feliz verano.
